Descripción:
Los seres humanos somos diversos tanto en nuestras expresiones y costumbres, como en nuestras maneras de ser, actuar y pensar. Es dentro esa indiscutible diversidad que forjamos relaciones sociales, comunidades, (des)afiliaciones y (des)encuentros por medio del lenguaje y de experiencias cotidianas. En la actualidad, el auge de la globalización, la internacionalización y las relaciones mediadas por la tecnología han acentuado el contacto entre los seres humanos y con ello las situaciones de conflicto, generando actitudes y comportamientos de rechazo, e incluso aversión, hacia el Otro. Por esto, surge la necesidad de reflexionar y actuar sobre nuestra manera de relacionarnos como seres humanos desde la empatía, la construcción de paz y el entendimiento del otro desde un enfoque intercultural.
La interculturalidad puede entenderse como “la capacidad de explorar, analizar similitudes, diferencias o los elementos inesperados de otra cultura (individual [Idiocultura]) o desarrollar (en la medida de lo posible) estrategias de ajuste situacional, comunicacional, relacional, etc. Se trata de adoptar una perspectiva interactiva crítica, de comprensión y asociación de la diversidad con personas conocidas y desconocidas, en situaciones actuales e inesperadas, así como en contextos múltiples (cercanos y lejanos)” (Gamboa, Molinié, & Tejada, 2019, pp. 21-22). Partiendo de esta definición y de otras nociones clave como la diversidad, la reflexividad, la alteridad y la performatividad, este curso brindará a los estudiantes herramientas para el análisis, reflexión y reconfiguración de las dimensiones interculturales presentes en el discurso, en las situaciones educativas y en su cotidianidad. En especial, se reflexionará en torno al rol de la educación en la promoción de encuentros interculturales y reflexividad en pro de sociedades más justas y democráticas.